En el artículo anterior ya conociste algunos tipos de acoso, ahora te comentaremos qué debes hacer si te sientes acosada o acosado por alguien en tu trabajo.
Como ya te hemos mencionado, generalmente el acoso comienza de forma sutil y paulatina, por lo que es difícil detectar que se está frente a un acosador o acosadora, pero en el momento que estés consciente de que estás frente a esta situación de “ACOSO” tienes una serie de herramientas a tu disposición para denunciar y poder frenar esta situación.
El acoso laboral, comienza con pequeños comentarios desafortunados, estos pueden ser sobre tu aspecto, tu trabajo designando, tareas que no son propias del área en que te desenvuelves, en ocasiones tareas humillantes, comentarios de tipo despectivo, entre otros.
A veces cuesta darse cuenta de que estamos frente a un acoso, por ende, puede pasar mucho tiempo y desencadenar en las victimas una serie de episodios de ansiedad, estrés, crisis de pánico, acabando en visitas constantes al médico… y es ésta la finalidad del acosador: dañar la salud, la reputación de un trabajador, qué es su víctima y que se encuentra realizando labores en el mismo lugar.
Es importante que sepas, que toda empresa está obligada a garantizar la seguridad y la salud de las personas que trabajan en ella, dado que esta responsabilidad incorpora una triple perspectiva: preventiva, pro activa y reactiva.
PREVENTIVA:
Toda empresa debe tener un código de conducta ético, así como un protocolo de actuación frente al acoso laboral, sea del tipo que sea. Este debe ser creado por el área de recursos humanos (RR. HH) en conjunto con el área de prevención de riesgos laborales (PRL), considerando la protección del trabajador en todos los ámbitos para evitar la manifestación de situaciones de acoso.
PROACTIVA:
La empresa debe tomar conocimiento del hecho, hacerse participe y buscar solución de manera activa, tomar la iniciativa en busca de solución de forma responsable y siempre priorizando el bienestar de la persona que se encuentra en estado de vulneración.
REACTIVA:
La empresa no debe esperar a que suceda una situación de acoso ni esperar que el problema se solucione sólo o que el afectado busque solución de forma independiente, sino que debe participar de forma activa en la búsqueda de la solución, con el objetivo de proteger a la víctima.
Si estás frente a una situación de violencia en el trabajo (independiente de su tipo), es absolutamente necesario que pongas en conocimiento a la dirección de la empresa, ya que si ésta desconoce la situación, no podrá ejecutar las acciones necesarias. Es siempre necesario que como víctima comuniques lo que sucede a través de un escrito a la dirección de Recursos Humanos, te debes quedar con una copia de éste donde quede estampada la fecha y el día que fue presentado y la firma de quien lo recibió. Si no te sientes seguro, también puedes solicitar que un tercero haga llegar este escrito a quien corresponda.
La empresa tiene la obligación de investigar los hechos denunciados y si esto no sucede, puedes acudir a la “Inspección del Trabajo” y presentar la denuncia o también denunciar directamente en “el Juzgado de Competencia y Jurisdicción”.
El primer paso que debe dar la empresa es separar a la víctima del acosador y luego buscar ayuda profesional externa para ambos, es imprescindible contar con ellos, ya sean peritos o psicólogos dado que pueden proporcionar herramientas para defender la agresión y como testimonio para efectos legales, dado que toda la información que se recopile, como mails, fotografías, grabaciones de conversaciones, entre otros, sean recopilados para demostrar la situación de acoso,
Por otra parte, es de vital importancia incorporar pruebas: informes médicos o psicológicos, una prueba pericial o psiquiátrica para ver el grado de afectación de la persona que está siendo víctima, esto porque el acoso laboral puede causar graves daños en la víctima, comenzando por ejemplo con algo tan simple como el deseo de quedarse en casa, enfermarse para evitar enfrentarse con la persona que le está acosando e incluso, llegar a provocar problemas de salud tanto físicos como psicológicos(malestares corporales, depresión, cuadros ansioso depresivo, etc.).
Si piensas que, ante tu denuncia, la empresa será indiferente o se quedará de brazos cruzados, ten presente que ésta tiene el deber de asegurar la protección de sus trabajadores, ya que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales tiene responsabilidad civil y penal. Por tanto, si la persona responsable de acoger tu denuncia porque estás siendo vulnerado o vulnerada, ha hecho caso omiso a la denuncia; al probar que legalmente tu denuncia era real, esa persona responsable de haber recibido la denuncia,puede acabar en el banco de los acusados.
Resumiendo:
Denunciar ante el juzgado competente:
Aquí se realizan todos los procedimientos legales y, es de suma importancia contar con las pruebas necesarias para demostrar que la acusación es cierta,.
De la protección ante el despido:
Si un empleado que pone una denuncia del tipo que sea ante la vulneración de sus derechos, y se le es despedido, en este caso tiene todas las posibilidades de que se considere el despido nulo. Pues es una decisión arbitraria ya que se realiza un proceso investigativo.
El derecho del trabajador está por encima de todo, por lo que todo actuar en contra de la víctima, se considerará como represalia por la denuncia interpuesta, por tanto, probablemente toda decisión tomada en contra de la víctima, será considerada nula. La Ley está de parte del trabajador, debe contar siempre con estas tres herramientas, la propia empresa, la inspección del trabajo y los juzgados que le garanticen gran protección en el caso de sufrir de acoso laboral.
Es fundamental señalar que, si tú te encuentras en esta situación, tienes que denunciar y mantenerte en su puesto de trabajo, porque la empresa está obligada legalmente a solucionar tal situación.
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